a veces, merece la pena


Mientras el señor de la casa deposita sobre el suelo la pesada carga del día y los ladrillos tiritan de frío bajo el manto que cubre las noches, a mí me da por ponerme a escribir sobre la nada. Recuerdo a mis amig@s y me pregunto por qué siguen queriéndome, y me doy cuenta de que, a veces, vivir merece la pena.


 
Foto: Monte Olivia, Tierra del Fuego, Argentina

2 comentarios:

  1. esa me la sé!!!! porque eres un encanto y porque siempre estás cuando se te necesita.

    Soy la prime, eso me gusta.
    Miss you soooo much!!!
    ps: la foto muy chula, de donde?

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  2. ains... no soy anonimo... soy yo, tu peor pesadilla: JAJAJAJAJA!!!!!!

    ale, voy a currar.
    besitos

    almu

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