Repito

Como decía ayer en facebook (corrigiendo algún blackberry-gazapo):
Estoy en medio del cráter de un volcán en Hawai. He subido una foto (para dar envidia:). Varios amigos habían colgado el link a la condena de Garzón. No vine aquí a escapar de nada, así que interrumpo el paseo para hablar.
Me da vergüenza pertenecer a un país que condena a quienes persiguen a los corruptos y exculpa a quienes hacen negocio y carrera con las arcas públicas. Necesitamos un cambio, una revolución, una primavera española haciendo gala de nuestra ascendencia árabe y con los principios de Gene Sharp por delante antes de que no haya más remedio que hacerlo a lo Che Guevara. La crisis es nuestra oportunidad para depurar nuestro escenario político y todas sus ramificaciones. Es momento de recuperar los tres poderes que no son sino del pueblo y asegurarnos de que son independientes, libres y sin corrupción. Hay que hacerles ver que no van a vivir nunca más a nuestra costa, mucho menos diciéndonos que lo hacen por nuestro bien ¡Que no somos tontos! Sus mentiras no se las cree nadie y ¡¡¡nosotros ya no debemos tragar más!!!

PD (meses después): Como es lógico, dada la situación en la que escribí este post, de lo que motivó estas palabras se quedó sin explicar más de lo que salió escrito. Soy plenamente consciente de que estos temas son muy complejos y pretender analizarlos en un par de párrafos es mera fantasía. Por si alguien lo duda, ya que no sé si por estos lares (o por ninguno, la verdad, por lo que estoy viendo últimamente) se me conoce lo suficiente, si Garzón cruzó la línea, si cometió delito, no tengo ningún problema con que se le condenara. La desproporción de la condena, la saña de la sentencia, el agravio comparativo, el castigo ejemplar, el que cacemos antes al que persiguiendo a los malos se equivoque o pase de listo que a los malos de verdad... esos y miles de detalles más son los que me hacen pensar que la sentencia de Garzón marca un antes y un después en el despropósito de país que parece queremos construir. Si no lo queremos, desde luego, lo estamos disimulando muy bien; con los cimientos que le estamos echando no va a haber quien lo tumbe en el futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario